Preparando el terreno: ¡COCINA!

Hace mucho que no me tomaba un tiempo para escribir… Han sido meses muy agotadores, pero fructíferos ya que estoy poniendo mi 100% por 100% para generar contenido de valor que te sirva ¡a vos que estás del otro lado!

Es por eso que te convoco a que en este mes de MAYO, pongas manos a la obra; si si, leíste bien, MANOS A LA OBRA para dejar a punto tu COCINA y hacer por fin un MENÚ adaptado a tu familia para que puedas sacarte un peso de encima a la hora de la temida pregunta: ¿Qué comemos hoy?.

Como este es un problema para mi, ya que todavía no lo tengo resuelto del todo, quiero acompañarte en este proceso y que JUNTAS podamos finalmente tener un MENÚ aunque sea semanal (si podemos hacer uno mensual y estacional, sería ¡ideal! pero vamos paso a paso)

Pero….. antes de hablar de menús y comidas, hablemos de nuestra COCINA:

1. ¿Que tenes alli?
2. ¿Que cosas te agradan mucho y quieres conservar?
3. ¿Cuales te gustaria vender, donar o tirar?
4. ¿Que “adornos” tenes?
5. ¿Cual es el aspecto en general? ¿Estás satisfecha?
6. ¿Que arreglos hacen falta?
7. ¿Sueles comer ahí o dispones de otro lugar?

Lo que te voy a recomendar es lo siguiente (algo que yo misma estoy haciendo): que recorras cada rincón de tu cocina, y hagas de cuenta que estas en un paseo de compras. De esa forma, me gustaría que cada objeto que veas, cada cosa que haya, tenga un costo en tu mente.

¿Porque te propongo esto? Por que muchas veces pasa que conservamos cosas sin tener en cuenta el por qué las tenemos, ocupan lugar visual y emocional, no aportan nada sino que restan un valioso espacio que podría estar vacío o bien ocupado con algo que si querramos.

Este ejercicio se lo propuse a mi marido y me miro raro ¡jaja!, pero de verdad ¡funciona! He sacado muchas cosas de mi COCINA (y las que me quedan por sacar…… jejeje) y poco a poco se va sintiendo más agradable estar ahí.

Aun me falta mucho, ya que hay cosas que no me pertenecen y debemos definir que hacer, pero ni siquiera eso va a frenarme a poner en orden y hacer descarte, ya que al fin y al cabo, soy la que paso mas tiempo alli 🙂

Es muy importante que recorras tu COCINA, que empieces a conectarte con las emociones que te genera estar ahí: ¿te sentís alegre/feliz? ¿te abruma/agobia? ¿el solo entrar hace que quieras salir corriendo?…. Lo que sea que respondas en este punto, estará hablando un poco de vos, y de lo que te está pasando, por eso no dejes pasar este ejercicio.

Procura que estar en tu COCINA no sea entrar en modo automático: hacer el desayuno, cocinar y lavar los platos….

Que tu COCINA sea un lugar de reflexión, que cada vez que entres, haya rico aroma, que te de gusto cocinar un budín (lo máximo a lo que aspiro cocinar en cuanto a lo dulce, prefiero mil veces lo salado jajaja), que tus recetas y libros de cocina decoren un estante, que la luz fluya por las ventanas… Que todo sea agradable y te inspire paz, eso es lo que quiero lograr en mi COCINA (aunque se que tenemos que hacer algunas remodelaciones, para optimizar mejor el espacio… pero eso es otrooo tema).

Hasta aquí hemos intentado poner en papel y en la mente todo aquello que queremos conservar, y lo que no (por favor, lo que se va de tu casa, ponlo en una bolsita y dale un destino final pronto porque sino será el principio del caos…. ¡y no queremos eso! jejeje)

Date tiempo de crear en tu mente la COCINA de tus sueños, ¡SE PUEDE LOGRAR! No necesitas mucho presupuesto para hacer algunos cambios que le den ese toque especial, y cálido de hogar.

Aquí te comparto una lista de cosas que he decidido eliminar de mi COCINA:

-Tuppers viejos/rotos/redondos

-Utensilios de plástico

-Ollas inmensas (que jamas use, ¡con mi bateria 5 piezas es más que suficiente!)

-Cuadros y decoración que no nos identifica

-Cajas vacías (que fui guardando vaya a saber uno con qué propósito)

-Tazas rotas o muy usadas

-Platos plásticos rotos o muy usados

-Vasos de plástico (realmente no se porque conservaba tantas cosas plásticas, ¡ni que tuviera un salon de fiestas!)

-MICROONDAS (¡si, leiste bien! Hace ya un año que lo regalamos, y ha sido la decisión más sabia que hemos tomado. Todo comenzó cuando nació mi bebé, y el pediatra nos dijo que intentaramos no usarlo para calentar comida del bebé. Nos dimos cuenta que en realidad, no lo usábamos nunca, y eso hizo más fácil el proceso de descarte. Ahora no solo ahorramos luz, sino también dejamos fluir nuestra creatividad a la hora de calentar comida sobrante, sumado a que también nos hemos vuelto más racionales a la hora de cocinar y que no quede comida como para un batallón ¡jejeje! Te invito a que hagas la prueba de no usarlo por un dia, y que dejes volar tu imaginación. ¡Te sorprenderás haciendo cosas que veías hacer a tu abuela o quizás a tu mama cuando la tecnologia todavia no habia surgido)

Próximamente:

• Mesa (que ocupa mucho espacio)
• 4 sillas (serán para acompañar a la mesa y poder venderlas)
• Alacena gigante (a la cual no tengo acceso y solo guardo cosas que jamas usare; y que además está superpuesta con otra, de tal forma que impide que se abra la puerta…. si, ya se, ¡muy antiestético!)

Como siempre, cuando hay que hacer DESCARTE y tomar acciones tan decisivas es muy bueno que no haya nadie que impida ese momento, ya que la frase típica de los familiares es: “¿Por que vas a sacar esa alacena? Se ve tan linda, seguro costó mucho dinero”, entonces ahi, una que estaba sumamente decidida a hacer ese cambio ¡puf!, otra vez en cero….

Así que, te recomiendo que hables con los miembros de tu familia, y que con sinceridad te digan si quieren o no formar parte de este proceso de renovación: si es un “SI”, entonces MANOS A LA OBRA, si es “NO”, como dice el dicho “mejor ayuda el que no estorba” ¡jajaja!

Bueno, creo que te deje con bastante tarea, se que vas a poder lograrlo y ¡me encantará ver tus avances en el grupo de Facebook!

Si te animas, sería genial que nos vayas mostrando tus progresos con fotos, comentarios, o nos consultes dudas… ¡Te espero!

¡Que tengas un precioso dia y que Dios te bendiga mucho!

¡Saludos!

CIN

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